SALTA.- Un rol fundamental cumplía un grupo de remiseros que trabajaba en la terminal de ómnibus de Salta. Allí captaban a jóvenes y adolescentes que llegaban de distintas localidades del norte argentino, y las introducían al mundo de la explotación sexual. La hipótesis surge de la sentencia con prisión preventiva que dictó el juez Federal N°2 de Salta, Miguel Medina, contra seis personas acusadas de promoción de prostitución y captación con fines de explotación sexual, agravados por la vulnerabilidad de las víctimas.

La disposición fue adoptada en la causa en la que también se encuentra imputado el ex intendente de Salvador Mazza, Carlos Villalba, sobre quien el juez ordenó la declaración indagatoria que no se pudo concretar. El ex jefe comunal está acusado de haber trasladado de Salta a Jujuy a dos de las víctimas rescatadas.

La orden que dispone la indagatoria fue recurrida por el imputado ante la Cámara Federal de Salta, según informó la Procuración General de la Nación, a cargo de Alejandra Gils Garbó.

La causa se inició el 29 de mayo cuando la Policía Federal tomó conocimiento de que en Salta funcionaría una banda dedicada a la trata de personas con fines de explotación sexual, en la que intervendrían remiseros de la terminal de ómnibus salteña.

La banda estaría integrada por seis personas, actualmente detenidas, que serían los encargados de captar mujeres en situación de vulnerabilidad (algunas de ellas menores de edad) y trasladarlas al cabaret "Don Quijote", ubicado en la ciudad de Salta, y "El Señor de la Noche", situado en Calama, Chile.

Conexión internacional

En la causa se investiga también la conexión de la banda con Bolivia y con Brasil, dado que los investigadores pudieron constatar que la hasta ahora identificada como líder de la red (Margarita Marisel Llanes) registra movimientos migratorios hacia esos países.

Las detenciones fueron realizadas el 14 de agosto en los allanamientos realizados en seis domicilios de Salta. En esos lugares fueron rescatadas 34 mujeres que no tenían sus documentos de identidad y que casi todas dijeron que los habían perdido. Sin embargo, mediante la intervención de integrantes de la Fundación María de los Ángeles se pudo constatar que los documentos se encontraban en poder de los dueños de los locales.

Villalba se encontraba en uno de los lugares allanados el 14 de agosto, y aunque al principio dijo que visitaba a unos amigos y que no sabía que allí funcionaba un prostíbulo, la declaración de dos mujeres lo comprometieron.

Ellas dijeron al juez que fueron trasladadas al lugar por el ex intendente de Salvador Mazza para ejercer la prostitución, por lo que el fiscal Eduardo Villalba pidió que fuera imputado por el delito de trata. Cuando Medina lo citó a indagatoria el mes pasado, la defensa de Villalba presentó un recurso en contra de la medida, y la decisión final recayó en la Cámara Federal de Apelaciones, con asiento en Tucumán.